Médicas de Tierra del Fuego se incorporan a la salud pública

Tres médicas finalizaron su residencia en Medicina General y se unen al sistema de salud pública fueguino, fortaleciendo la atención en la provincia.

Tras la culminación de su residencia en Medicina General, tres médicas fueron formalmente incorporadas a la planta de profesionales de la salud pública en Tierra del Fuego, en un acto que reunió a autoridades, familiares y equipos de trabajo en la Casa de Gobierno provincial. La ceremonia, marcada por la emoción y el reconocimiento, reafirma el compromiso de la provincia con la formación y retención del recurso humano sanitario, crucial para el bienestar de sus comunidades.

El acto de entrega de certificados y la importancia de la formación

El evento fue encabezado por la vicegobernadora Mónica Urquiza y la ministra de Salud, Judit Di Giglio, quienes destacaron la importancia de la formación en salud y la continuidad de estos profesionales en la provincia. En la ceremonia, recibieron sus certificados las médicas Magdalena Magnelli, Soledad Virginia Suárez y Ana Belén Ascue, quienes culminaron exitosamente su residencia en Medicina General en Tierra del Fuego. La presencia de sus familiares, amigos y los equipos de salud acompañó este momento de cierre de una etapa y apertura de nuevas oportunidades laborales.

Es importante resaltar que las profesionales completaron su formación junto al médico José Ignacio Bonaparte, quien, tras viajar a su provincia natal, decidió no continuar en Tierra del Fuego. La incorporación de las otras tres médicas representa un aporte valioso para la comunidad y la atención sanitaria en la región, sobre todo en un contexto donde la demanda de médicos en el sistema público es cada vez mayor.

El compromiso de la gobernación y la salud pública

Durante el acto, la ministra Di Giglio expresó su satisfacción y orgullo por la decisión de las médicas de quedarse en Tierra del Fuego y sumarse a la planta estable del sistema de salud pública provincial. En sus palabras, la funcionaria resaltó: “Celebramos el esfuerzo, la vocación y la decisión de estas profesionales de formar parte activa de nuestro sistema sanitario. La Medicina General es fundamental porque constituye la puerta de entrada para miles de familias fueguinas que necesitan atención primaria de calidad”.

Asimismo, Di Giglio hizo énfasis en los desafíos que enfrenta Argentina en materia de formación médica, subrayando la necesidad de seguir promoviendo estrategias que incentiven a los jóvenes a elegir carreras relacionadas con la salud, especialmente en áreas básicas como Medicina General, Pediatría, Clínica Médica y Terapia Intensiva. La permanencia de estos profesionales en la provincia es considerada una pieza clave para garantizar una atención sanitaria eficiente y cercana a la comunidad.

Retos y futuro del sistema sanitario en tierra del fuego

La incorporación de estas médicas se enmarca en las políticas provinciales para fortalecer la salud pública, disminuir las brechas en la atención y ampliar la cobertura sanitaria en zonas alejadas y rurales. Tierra del Fuego, con su geografía dispersa, requiere profesionales comprometidos con la comunidad y dispuestos a afrontar los desafíos propios del sistema sanitario en contextos de alta demanda y recursos limitados.

El acto de reconocimiento y la certificación oficial son un paso importante en la consolidación de un sistema de salud más estable y sostenible, que prioriza la formación local y la retención del talento médico en la provincia. La decisión de estas jóvenes profesionales de continuar en Tierra del Fuego no solo refleja su vocación, sino también la voluntad política de la provincia de invertir en recursos humanos como pilar fundamental para el desarrollo sanitario.

En conclusión, la incorporación de las médicas Magdalena Magnelli, Soledad Virginia Suárez y Ana Belén Ascue a la planta de profesionales de la salud pública fueguina representa un avance significativo en la política sanitaria de Tierra del Fuego. La provincia reafirma su compromiso con la formación y la retención del recurso humano sanitario para ofrecer una atención de calidad y fortalecer su sistema de salud en beneficio de toda la comunidad.