Menos fondos para obras en Argentina impactan al país

La reducción de financiamiento nacional afecta obras clave en Ushuaia y otras ciudades, perjudicando el desarrollo y la generación de empleo.

Menos fondos para obras en Argentina impactan al país

La reducción de financiamiento nacional afecta obras clave en Ushuaia y otras ciudades, perjudicando el desarrollo y la generación de empleo.

El recorte en los fondos destinados a obras públicas por parte del Gobierno nacional genera un impacto significativo en el desarrollo urbano, afectando no solo a Ushuaia, sino también a muchas otras localidades del país. La decisión tomada por el oficialismo, bajo la gestión del presidente Javier Milei, ha sido calificada como una “motosierrа” que, en palabras de las autoridades municipales, “no solo impacta a los municipios, sino que también perjudica directamente a la gente”. La reducción en el financiamiento para infraestructura pública limita la concreción de proyectos esenciales para mejorar la calidad de vida de los vecinos y promover el crecimiento económico local.

La decisión unilateral que afecta el desarrollo local

La secretaria de Planificación e Inversión Pública de Ushuaia, Belén Borgna, expresó su preocupación por la política del Gobierno nacional, que decidió restringir de manera unilateral la inversión en obras públicas. Desde su perspectiva, esta estrategia no solo frena la ejecución de proyectos en marcha, sino que también impide la planificación de nuevas intervenciones que resultan fundamentales para la ciudad y el país en general. La funcionaria resaltó que “la motosierra de Milei no solo afecta al Municipio, también afecta a la gente”, y que, en ese contexto, el municipio se ve en la necesidad de redireccionar los fondos propios para mantener en marcha obras prioritarias, como la puesta en valor del espacio público y servicios básicos.

El cambio de escenario en la infraestructura nacional

A diferencia de gestiones anteriores, cuando las políticas de inversión federal garantizaban una distribución equitativa y sostenida de recursos, en la actualidad la situación cambió radicalmente. Borgna remarcó que en épocas pasadas, el Estado nacional contribuía con equipamiento, infraestructura vial, construcción de viviendas, centros educativos y hospitales, logrando que los municipios puedan acceder a recursos que permitían equilibrar las desigualdades territoriales. La reducción en el financiamiento ha llevado a que las ciudades deban afrontar sus desafíos con recursos cada vez más escasos y sin apoyo federal suficiente, lo que limita las posibilidades de avance y mantenimiento de las obras públicas esenciales.

Proyectos en marcha y futuros desafíos

A pesar del contexto adverso, desde el Municipio de Ushuaia continúan trabajando con recursos propios para mantener en marcha proyectos estratégicos. Entre las obras en ejecución o próximas a concluir, Borgna mencionó la terminación del edificio de Defensa Civil, la construcción de una pasarela en Luis Pedro Fique y el mejoramiento del ingreso a la ciudad, que se realiza mediante un acuerdo de financiamiento con la Provincia. La funcionaria subrayó que “tenemos la capacidad de reinventarnos y buscar soluciones en función de nuestras prioridades”, resaltando la importancia de gestionar con creatividad y compromiso para afrontar la situación.

Consecuencias y futuro de la invertir en infraestructura

Finalmente, Borgna lamentó la decisión política unilateral del Gobierno de Milei, que, en su opinión, se basa en prejuicios y preconceptos, sin un análisis previo de las consecuencias. La funcionaria advirtió que esta política no solo frena la inversión en infraestructura, sino que también provoca la pérdida de puestos de trabajo y frena una actividad económica clave para el país: la construcción. La reducción en los fondos nacionales puede tener efectos duraderos en el desarrollo social y económico, afectando la calidad de vida de la población y la capacidad de los municipios para responder a sus necesidades más urgentes.