Ushuaia intensifica limpieza tras desborde del arroyo Buena Esperanza

La Municipalidad de Ushuaia realizó un operativo para remediar los daños y limpiar los sectores afectados por la creciente del arroyo Buena Esper

Ushuaia intensifica limpieza tras desborde del arroyo Buena Esperanza

La Municipalidad de Ushuaia realizó un operativo para remediar los daños y limpiar los sectores afectados por la creciente del arroyo Buena Esperanza.

Ushuaia enfrenta nuevamente los efectos de fenómenos climáticos extremos que han provocado el desborde del arroyo Buena Esperanza, una situación que requiere respuestas inmediatas y coordinadas por parte del municipio. La Municipalidad, a través de la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable, desplegó un operativo integral de limpieza y remoción de sedimentos en las zonas más afectadas, buscando mitigar los daños y prevenir futuras complicaciones.

Imagen relacionada

Operativo municipal de limpieza y remoción de sedimentos

En respuesta a la creciente extraordinaria del arroyo Buena Esperanza, las tareas principales incluyeron la remoción de barros superficiales, la limpieza exhaustiva de los sistemas de alcantarillado y trabajos en las canales pluviales afectados. La colaboración con la empresa Agrotécnica Fueguina fue fundamental para garantizar la eficiencia de las tareas, que también contemplaron el despeje de piedras y sedimentos arrastrados por las intensas precipitaciones y el deshielo en las últimas jornadas.

Estas acciones permitieron reducir riesgos en las calles y avenidas principales, además de facilitar el flujo del agua en los sectores urbanos que habían sido afectados por la acumulación de sedimentos y residuos. La intervención se concentró en las zonas de Aldo Motter, Trejo Noel, Marcos Zar, Walanika, Yrigoyen y Fueguia Basket, que fueron los focos donde el impacto del desborde fue más severo.

Imagen relacionada

Causas del desborde: clima extremo y eventos extraordinarios

Desde la Secretaría de Planificación e Inversión Pública explicaron que la situación actual responde a un fenómeno meteorológico de carácter excepcional. Las intensas lluvias, combinadas con el deshielo de los glaciares y las crecientes repentinas en los cursos de agua, generaron un aumento abrupto en el caudal del arroyo Buena Esperanza, superando ampliamente los niveles habituales.

En las primeras ocho jornadas de noviembre, la cantidad de precipitaciones acumuladas superó el promedio mensual de los últimos 30 años, una tendencia que recuerda los picos de lluvia ocurridos en 2009, cuando también los arroyos Buena Esperanza y Chorillo del Medio alcanzaron niveles de alerta similares. La creciente extraordinaria, por tanto, evidencia una vez más la vulnerabilidad de la ciudad ante eventos climáticos extremos cada vez más frecuentes.

Imagen relacionada

Impacto y prevención en el futuro

El impacto de estos fenómenos atmosféricos se refleja en la infraestructura urbana, en la movilidad de los vecinos y en el cuidado del medio ambiente. La Municipalidad de Ushuaia se mantiene en alerta, monitoreando constantemente las condiciones climáticas y reforzando las tareas preventivas en zonas de riesgo para evitar desbordes y daños mayores en el futuro cercano.

Asimismo, se están evaluando medidas de inversión en infraestructura hídrica y sistemas de drenaje que puedan hacer frente a escenarios similares, en un contexto donde el cambio climático pone a prueba la resiliencia de las comunidades patagónicas.

El compromiso del gobierno local es seguir trabajando en articulación con diferentes áreas y actores para reducir los riesgos y asegurar la protección de la comunidad frente a las adversidades climáticas. La coordinación entre la Secretaría de Medio Ambiente, Planificación y las empresas contratadas resulta clave en estos momentos de emergencia.

En conclusión, la respuesta rápida y coordinada de Ushuaia tras el desborde del arroyo Buena Esperanza demuestra la importancia de la planificación y la inversión en infraestructura para hacer frente a eventos meteorológicos extremos. La experiencia de este episodio refuerza la necesidad de fortalecer las acciones preventivas y de mantener a la comunidad informada y preparada para futuros desafíos climáticos.

Imagen adicional
Imagen adicional
Imagen adicional
Imagen adicional
Imagen adicional